mi COMPROMISO: tratárle como si fuera mi ÚNICO cliente
Años atrás, cuando aún era estudiante de Derecho fui testigo de una queja de un cliente a su abogado. Al parecer el abogado no estaba adelantando el tema del cliente y éste se justificó diciendo que tenía varios asuntos importantes que atender y que el caso del reclamante era un “simple desahucio”. La cara del cliente reflejaba su frustración y preguntó “¿porqué aceptó mi caso si no tenía tiempo de llevarlo?”
En aquel momento entendí que para cada cliente su asunto es el único asunto importante.
Mi compromiso con mis clientes ha sido siempre tratar a cada cliente como si fuese mi único cliente. Mi objetivo es responder a las consultas de mis clientes y despachar sus asuntos con agilidad. No creo oportuno hacer marketing para atraer nuevos clientes mientras los expedientes de los clientes existentes están desatendidos en la mesa de mi despacho. Mi mejor herramienta de marketing ha sido siempre las referencias dadas por clientes satisfechos.
Por otra parte considero muy importante la comunicación con mis clientes. La falta de comunicación reduce sustancialmente las oportunidades de satisfacer al cliente y normalmente resulta en una representación inadecuada de sus intereses. Si el abogado no conoce los hechos en profundidad no puede garantizar que su actuación sea la más beneficiosa para el interés de su cliente.
La comunicación entre cliente y abogado tiene que ser abierta y honesta. La relación entre el abogado y su cliente tiene que basarse en la confianza. Mi objetivo es obtener una clara idea de las necesidades legales de mis clientes, analizar las circunstancias especiales de su caso, buscar alternativas posibles, explicarlas al cliente de forma clara para que sean entendidas y que el cliente pueda entonces decidir con pleno conocimiento.
Si desea más información acerca de qué puedo ofrecerle, le recomiendo que visite la sección de testimonios.
